jueves, 22 de abril de 2010
Tu Puedes Felipe....Yo Creo en Tí.
Palabras en el Viento....
Un Soñador…
Sentado.... Esperando
Estoy sentado bajo los rayos del Sol en esta piedra dura, dueña del monte y cobijo de insectos .Sigo esperando a que corra el tiempo, para poder ver el atardecer, sentir como se funde la llama y la tierra en el horizonte frente al mar, y como regresan los pájaros del norte, para dormir en el sur de su destino. He venido de visita a esta solitaria Cala, para aclarar mis pensamientos y sentir que lo he perdido, nunca sabré si realmente lo llegue a tener, en fin, Ahora solo falta esperar y aceptar que toque mi puerta el olvido, y que el viento se lleve junto con las hojas que tira el verano sus recuerdos, que mi mente quede desnuda como los árboles en octubre .Me recomendó una anciana lugareña, que el mejor sitio para meditar es esta pequeña montaña frente a la cala y más al estar sentado en una piedra y mirar la conjunción de cielo ,tierra y mar. Olvidar es solo un paso a no recordar, a que se alejen imágenes y momentos a que reconstruyan lo que hoy ya es pasado. Los minutos siguen y dan su venia para que la noche llegue, extendiendo sus brazos, cobijando con su capa una visión más al universo, las estrellas solícitas aparecen para salir en un verso, es tan clara la vida bajo lo que es vida, y es tan insignificante el todo bajo lo inmenso. El frío silba su desventura y el paso del aire bajo los brazos de un árbol, grita desesperado un nombre... el tuyo. Asustado recorro el lugar con la vista, todo es del color de la noche y la soledad es la única compañera . El fuego de la hoguera, quiere morir junto con tu recuerdo, yo avivo el primero con más leña y recojo cenizas con el segundo, truena la madera vieja, joven en este momento, las llamas la abrazan, la envuelven queriendo consumirla. Enciendo un cigarro, pobre en tabaco, rico en sentimiento, en el instante de la primera fumada se dibuja tu rostro con el humo y se escribe mi nombre en el sendero, el frío arrecia su cometido y a mi me hace titiritar y recordar tus brazos y aquellos pensamientos cuando estuvimos juntos y lo que decías tu . “Cuando sientas frío, piensa en alguien que quieras, en que vuela en el aire, entonces aspira y quédate acompañado ”ahora que menciono estas palabras, me he dado cuenta que el venir al cerro y sentarme en esta piedra dura y ver la oscuridad de la lejanía no me han hecho olvidarte sino recordar lo que aun esta vivo todo lo que aún siento… Raúl García.